CORRER O NO CORRER, ESA ES LA CUESTIÓN.

Hay mucha gente que ve perros (mejor dicho guías) corriendo detrás del perro y son muy criticados por ello.

¡Y no van equivocados! No es bueno correr detrás del perro porque éste puede pasar de seguir el trail a hacer canicross en cuestión de segundos.

¡Peeeero!

Hay varias cosas a tener en cuenta:

• ·     Limitar mucho la velocidad de un perro que está siguiendo el trail puede crear bastante frustració. Un braco de gran zancada, hecho para correr y trabajar con una gran amplitud de movimientos se puede ver bastante limitado y frustrado si le obligamos a correr. Puede pasar lo mismo con Malinois, Amstaffs, etc. El juego, hecho de esta manera, puede dejar de ser divertido.
• ·     Cuando iniciamos a un perro o hacemos Intensities para entrenar componentes nuevos, etc… Buscamos crear una pasión que a menudo va unida a la velocidad (= ganas de encontrar el figurante)

Además, hay perros que son rápidos siguiendo el trail sin que eso signifique que no están “trabajando”, es decir, usando la nariz (¿Acaso no lo hacen los perros de venteo buscando el cono de olor de la persona?)

Lo importante es:

• -   No correr por correr haciendo canicross.
• -    Adaptar en la medida que sea posible la velocidad del perro al ritmo de su guía (sin frustrar al perro). Podemos “enseñar” al perro a no correr demasiado poniendo más tensión en la correa.
• -    Evidentemente, si es posible, buscar una raza o tamaño que se ajuste a nuestras dimensiones corporales y forma física.

En fases más avanzadas del entrenamiento, cuando hagamos Trails con Motivación de Inicio Retardado y/o Trails de Inicio en Artículo de Olor (Sin figurante delante) y luego añadamos antigüedad la velocidad del perro va a disminuir muchísimo.

 

 

Mi Labrador en los Intensities tiraba un montón. Hasta el punto de cerme de espaldas un día en un suelo resbaladizo. Era un rollo, porque tenia que estar más pendiente de no caer que de leer sus movimientos. Ahora con Happy puedo ir más relajada (a veces también corremos para crear motivación, pasión, etc…) pues pesa sólo 18 kilos.

 

QUÉ PASA CUANDO NO HAY TRAIL

Como ya he mencionado en otras ocasiones, uno de los requisitos esenciales para un perro de mantrailing operativo debería ser su capacidad de indicarnos que no tiene trail.

Esto va a agilizar la búsqueda, pues nos va a permitir chequear un área por si hay trail (si por ejemplo alguien ha dicho que ha visto a la persona o una cámara ha grabado una persona de aspecto similar.

Con un perro bien entrenado podremos saberlo con un elevado índice de exactitud.

En el caso del video, había olor alrededor del vehículo, pero la persona había bajado del coche y subido a otro que estaba al lado, por lo que hay olor alrededor del coche, pero no hay trail.

Haciendo bien la vuelta de INVENTARIO DE OLORES el perro es capaz de decirnos rápidamente que no tiene trail.

Me encanta ver cómo, a pesar de a frustración de Coco, que obviamente quiere seguir un trail, se “rinde” e indica a su guía que no tiene nada que seguir.

Recordad mi frase:

SI HAY TRAIL SÍGUELO; SI NO HAY, DÍMELO.

El entrenamiento de este comportamiento es sencillo, pero no simple y requiere entrenar bien la progresión para que el perro lo comprenda.

Aquí tenéis el video:

ENTRENANDO PARA LA VIDA REAL - CASTING

Nuevo vídeo en mi canal You Tube (This time I also made an English version of the video).

El video consiste en una recreación/simulación de un supuesto real más bien de ámbito policial:

•       Robo con huida en vehículo.
•       Cambio de vehículo a media huida.
•       Bajar del vehículo y seguir a pie para esconderse.

Es un ejercicio que parece simple pero es bastante complejo. Empieza en el punto donde se ha producido el cambio de vehículo.

En la primera parte del ejercicio el perro debe comprobar si hay trail saliendo del vehículo abandonado (el figurante/conductor del vehículo había dado 4 vueltas alrededor para crear una piscina de olor antes de subirse al segundo coche) y luego, en correa corta (haciendo un casting) el perro debe intentar cortar el trail que ha dejado la persona al bajarse del segundo coche para esconderse en el bosquecito.

 

Es un ejercicio no demasiado largo, pero de gran complejidad. Tanto el marcaje de No Hay Trail como el casting requieren trabajo y mucha complicidad guía-perro. Verlos tan bien ejecutados es una maravilla.

Recordad, mantrailing no es únicamente seguir al perro. Es un trabajo de binomio en el que el perro debe comunicarnos si tiene algún problema y el guía debe pensar más allá.

El mantrailing puede ser tan sencillo y tan complicado como tu quieras. Piensa bien cuál es tu objetivo y busca la manera de conseguirlo.

DESPACITO Y BUENA LETRA

Cuando empezamos mantrailing con un perro tímido o inseguro porque nos han comentado que puede serle muy beneficioso tenemos que ser EXTREMADAMENTE CUIDADOSOS.

¿¿¿Cómo va a coger comida de un extraño que se la muestra (A veces poniendo el tupper demasiado cerca de la cabeza del perro, a veces con una voz demasiado alta o chillona, a veces de manera demasiado invasiva...) y luego desaparece???

Cuando yo me encontrado con casos así, puedo optar por:

1. Pedir que se esconda un familiar, que hará los inicios más sencillos.

2. En caso de que eso no sea posible, escoger un figurante que sea lo más aceptable/neutro posible para el perro y sobre todo que sepa adaptarse a la perfección a las instrucciones que le dé el guía:

• Que motive (muestre el premio, normalmente comida) posicionándose a distancia, sin ser invasivo, usando una voz suave.
• Hacer un trail cortísimo.
• Cuando llegue el perro, premiar con voz suave y no pretender que el perro se acerque demasiado y tome la comida de la mano (¿¿Cómo pretendemos que lo haga, si no le conoce ni hay confianza???)
• Podemos depositar la comida en el suelo y alejarnos un poco para que el perro, acompañado por su guía, vayan a cogerla y celebren el éxito juntos.

 

Poco a poco, sin prisa, si el perro disfruta del mantrailing va a coger comida de todos sus figurantes. MI experiencia así lo demuestra.

Es tan bonito ver como progresan los perros si hacemos bien las cosas…

Eso si, no todo vale para aprender mantrailing y no todo el mundo se adapta a todos los perros.

¡Y no pasa nada! Todos somos diferentes.

Simplemente, observa a tu perro y mira si, aparte del pequeño estrés que supone salir un poco del círculo de confort haciendo una actividad nueva, se siente lo suficientemente cómodo para seguir.

Me dan mucha ternura los perros tímidos e inseguros, porque dentro de cada uno de ellos hay un corazón que desea y necesita alguien que le acompañe en su crecimiento “perronal” (😉)

Fijáos en la posición corporal de Lula al llegar al figurante, en el primer seminario al que vino.

¡Fijáos que cambio en el último seminario!

DE REPENTE... LLEGA LA MAGIA.

 De repente surge la magia.

En los años que he estado llevando grupos de mantrailing haciendo formaciones (¡No puedo ni imaginar cuántos binomios he conocido!) hay una cosa que he ido observando y creo que es importante que la gente que empieza la comprenda.

Los primeros tiempos entrenando un perro suelen ser un caos, sobre todo cuando hablamos de un guía novato y un perro también novato.

Nos hacemos un lio con la correa, nuestra posición corporal es un desastre, no tenemos ni idea de leer a nuestro perro, a duras penas conseguimos mantener cierta tensión en la correa… o no caer, en el caso de perros muy rápidos… Es imposible que podamos observar a nuestro perro. ¡Por no hablar de hacer un mapa mental de lo que hacemos! (¿¿Quién se acuerda de por dónde hemos pasado hace 10 segundos??).

Y claro, los perros inevitablemente también se hacen un lio.

Hay gente que tira la toalla diciendo que es demasiado difícil, que el perro no va bien o que esto del mantrailing no funciona.

Pero la gente que no abandona, la que sigue entrenando sin perder la motivación aunque no siempre todo vaya como una seda, llega un día en el que por fin sienten…

LA MAGIA

Como un engranaje que ha ido a trompicones durante un tiempo y al final encaja a la perfección, también el binomio de mantrailing llega a un punto en el que de repente todo fluye y se hace fácil. A veces pasa sin que ni siquiera ellos se den cuenta, pero desde fuera ¡se ve tan claro!

Recuerdo una vez un guía que al acabar el trail me dijo: Tengo suerte, lo hace todo ella, yo no hago nada.

Y yo le respondí: ¡No te engañes! Tu detrás de tu perra, lo haces todo sin darte cuenta: tus movimientos son fluidos, no entorpeces para nada su trabajo, te dejas guiar por ella, confías en ella y ella se siente segura de lo que hace.

Es ese momento en el que el binomio ha conseguido ser ese “engranaje perfecto”.

ALEIX & K9 SAMI

Luego van a venir dificultades de nuevo, por supuesto, porque en mantrailing siempre hay que luchar y entrenar duro, pero es otra fase del entrenamiento en la que podemos avanzar en otros aspectos.

Por eso cuando tengo binomios que se desmoralizan o se frustran les explico esto. Porque se por experiencia que si se dedican en serio y a conciencia...

... también ellos van a llegar a sentir esta magia.

ES MANTRAILING. Y ES UN POCO MÁGICO.

¿Rastro? ¿Mantrailing? Lo mismo.... pero ¿¿diferente??? ¡Socorrooooo!

 

En español, por el momento, no hay una palabra que pueda sustituir TRAILING/MANTRAILING y por eso usamos la palabra inglesa mantrailing.

Al inicio de empezar a hacer seminarios la gente nos decía que usar la palabra inglesa MANTRAILING era puro esnobismo porque el mantrailing era “el rastro de toda la vida”.

Ahora, pasados unos años, la percepción de las cosas ha cambiado y todo el mundo se sube al carro del “MANTRAILING” aunque hagan, de hecho, RASTRO.

Porque si, son dos maneras distintas de trabajar. Y es importante comprenderlo. Por eso yo en mis formaciones siempre insisto en ello cuando hago la parte teórica.

¡Y no lo digo yo, eh!

Comparto con vosotros dos definiciones:

La primera la descripción que aparece en el libro Scent and the Scenting Dog, de Willian G. Syrotuck.

Perro de tracking

En sentido estricto de la palabra, el perro debería marcar casi cada uno de los pasos del sujeto. No debería separarse de estas pisadas más de uno o dos pies (equivalentes a unos 30 a 60 centímetros) a pesar de las condiciones del viento. Es típico que lleve la cabeza agachada, olisqueando el terreno buscando evidencias. Los Bloodhounds son la imagen tradicional de los perros de rastro. El perro se ciñe básicamente a las pisadas.

(No os suena esto al “rastro de toda la vida”?)

Perro de trailing

El perro se orienta más a las escamas que caen a suelo mientras el sujeto se mueve. El perro puede trabajar a cierta distancia de las pisadas. Parecerá que recorta en algunas esquinas y en otras se excede.

Algunos perros incluso se pararán a oler hojas de vegetación a unos 2 a 3 pies (60 a 90 centímetros) del suelo y en algunos casos a 30 yardas (27 metros) de donde están las pisadas. Algunos perros se alejarán de las pisadas hasta el límite donde hay escamas y volverán de nuevo a las pisadas.

 

Otra definición de mantrailing la podemos encontrar en la página web de la AMPWDA (American Mantrailing, Police & Working Dog Association):

Mantrailing es la búsqueda de olor esecífico del olor de un individuo, siguiendo las escamas de la piel (Células que se desprenden de la piel) sea donde sea que se han dispersado. A veces el perro trabajará con la nariz abajo y otras más arriba, recogiendo el olor lo mejor que pueda. Mantrailing es realmente una combinación de rastro y mantrailing, porque el perro usa todas las herramientas que tiene disponibles. El tiempo, el viento y la topografía determinarán la manera de trabajar del perro. Por esto, muchas veces el perro de mantrailing trabaja alejado de las pisadas. Además, el perro de mantrailing puede trabajar trails muy antiguos, mientras que el perro de rastro está limitado únicamente a trails muy frescos, normalmente de menos de 30 minutos de antigüedad.

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Hay mucha gente que desea que su perro de mantrailing trabaje con la nariz pegada al suelo y se esfuerza para que así lo haga. Es muy bonito verlo, ciertamente.

Pero es agotador para el perro y en mi opinión limita mucho la libertad del perro para trabajar de la manera más natural posible. Como dice el libro mencionado arriba, hay perros que de manera instintiva trabaja a ras de suelo y otros que no, como mi Labrador y mi Schnauzer, por ejemplo.

De hecho, si el perro está suficientemente motivado para encontrar al figurante, buscará su mejor estrategia para seguir el trail, subiendo y bajando la cabeza según lo necesite.

Ese es nuestro objetivo: Que nuestro perro se esfuerce para seguir el olor, esté donde esté.