Siempre decimos que en
mantrailing el perro tiene que ser muy autónomo, que se le tiene que ayudar lo
mínimo posible para no hacerle dependiente de nosotros.
Queremos un perro que tome
decisiones por si solo, un perro que aún cuando sin querer le influenciemos con
la correa (dando tirones, por ejemplo) o con nuestra posición corporal, siga su
trabajo sin que eso le influya, como si no hubiese nadie al final de la
correa (Aunque pobres perros, a vecessomo muuuuy torpes!).
¡Pero!
Habrá momentos durante un trail
en los que vamos a tener que tomar la iniciativa; momentos en los que nuestra
intervención será esencial para ayudar a nuestro perro a seguir trabajando.
Nosotros, por poner una cifra, decimos que:
el perro hace un
90% del trabajo y nosotros tenemos que hacer el 10% restante
Este 10% corresponde a los momentos en que tenemos que
tomar la iniciativa porque el perro tiene un problema que no puede resolver por
si mismo.
Algunos de estos momentos serían:
Cuando pierde el trail y tiene
que recuperarlo.
Cuando un perro pierde el trail puede que lo tenga
detrás, a los lados o incluso delante (cuando el figurante ha cruzado un río,
un edificio, una autopista...). En este caso tendremos que reaccionar
rápidamente y llevarle nosotros (con correa corta) a hacer un casting en esas
zonas para ver si lo recupera. De los castings hablaremos en otra entrada del
blog.
Casting Controlado para encontrar el trail
Cuando se encuentra con un
obstáculo que no le permite seguir el trail.
Enseñamos al perro a indicarnos cuándo hay algo que
le imposibilita seguir el trail y le ayudamos a superarlo (abriendo la puerta,
saltando la valla, cruzando el río, etc.) para que siga trabajando.
Cuando durante el trail el
perro se cansa o se desmotiva.
Si le vemos desmotivado podemos pararle y hablarle
para volverle a subir la motivación. Es lo que llamamos Charla Motivacional
(Pep Talk). Si está muy cansado también, aunque en este caso quizás lo mejor
sería dejarle descansar un rato o sustituirle por otro perro del grupo.
No tengamos miedo de ayudar a nuestro perro cuando, como en
los ejemplos mencionados, nuestro perro lo necesita, pues eso le hará sentirse
parte del equipo.
Lo que tenemos que EVITAR a toda costa es:
·
Influenciarle con nuestro cuerpo o correa para que siga
el trail.
· Ayudarle antes de tiempo o cuando en realidad no lo
necesita. Eso le hará más débil y dependiente de nosotros, cosa que le va a
perjudicar mucho en su trabajo.
---------------
Pero ayudarle en ciertos momentos si, por supuesto. No
tenemos que olvidar nunca lo más esencial: SOMOS UN EQUIPO y cada uno de
nosotros, en este equipo, tiene asignada una tarea.
La nuestra es estar atentos a
nuestro perro, observarle, leerle y si vemos o nos indica que tiene un
problema...
¡ REACCIONAR !