(Es como yo lo hago; hay muchas otras maneras, por
supuesto, y todas ellas igual de válidas. Es importante también adaptar los
ejercicios a cada perro)
En el vídeo vais a ver el segundo día de entrenamiento de Vicky, una Weimaraner de siete meses y su guía, completamente inexpertos los dos.
Al principio todo es caos...
El perro: No entiende el trabajo, no sabe qué pasa y parece como
desconcertado.
Mira al guía pidiendo ayuda.
A veces se queda parado sin saber
qué hacer, se pone a olisquear...
El guía: El manejo de correa es inexistente.
No sabe dónde colocarse.
No sabe cómo motivar, felicitar, ni
animar/ayudar a su perro.
Pocos ejercicios bastan para que
el perro entienda el ejercicio:
SI SIGO LA ESTELA DE OLOR DE LA PERSONA QUE ME MUESTRA
MI JUGUETE/COMIDA VOY A ENCONTRARLE Y ME LO DARÁ
Al guía le cuesta un poco más
trabajar su manejo de correa, su posición tras el perro, su manera de animar
y/o ayudar al perro y su actitud verbal y corporal para NO influenciar al
perro.
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APRENDICES DE MANTRAILING
Para mí el mantrailing al inicio
es como cuando aprendes a conducir. Al principio estás pendiente de todo:
retrovisor, cambio de marchas, los otros coches, los peatones, las señales de
tráfico... Poco a poco con la experiencia acabas conduciendo sin ni siquiera
darte cuenta de lo que estás haciendo.
Eso mismo pasa con el
mantrailing. Poco a poco vas integrando las cosas en tus trails, tu posición
tras el perro es la ideal para no influenciarle, tu manejo de correa es sutil,
no hay tirones, la correa no se arrastra por el suelo, sabes cómo animar a tu
perro si flaquea, cómo felicitarle cuando encuentra al figurante...
Y todo fluye... Y el mantrailing
se convierte en esa DANZA de la que tanto habla Kevin Kocher.
Y parece fácil a pesar de
no serlo en absoluto.
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LOS PRIMEROS PASOS:
¿Cómo preparo yo los trails para
perros que se inician?
- Antes de nada me aseguro de que el “conejo”, es decir el premio, gusta mucho al perro, es decir que estará muy motivado a encontrarlo.
- Empiezo en zonas urbanas tranquilas para evitar demasiados estímulos.
- Evito siempre, desde el inicio, que el perro use su vista para buscar: Lo normal es que primero busque a vista, pero pronto se dará cuenta de que la vista no le sirve de nada pero en cambio su olfato si. Y eso es justo lo que queremos. Este punto es especialmente importante para perros muy visuales ,como los pastores.
- Busco un figurante que sepa motivar y premiar bien al perro.
- Hago varios trails muy cortitos encadenados escondiendo el figurante en distintos sitios: Tras una esquina, en una entrada de garaje, detrás de un coche...
- Así vamos preparando al perro para que no “prevea” dónde se esconden los figurantes.
- El trail deberá tener al menos un ángulo.
- Desde el inicio el figurante deja el artículo de olor delante del perro (sin premios ni nada, claro, no queremos que el perro busque premios en lugar de estar pendiente de encontrar al figurante con su premio).
- Aunque el perro ya ve y huele al figurante cuando éste le motiva, dejamos el artículo para crear la rutina de “HUELE-BUSCA” desde el inicio para que tanto el perro como el guía la interioricen.
- El figurante debe ser rápido y el trail no demasiado largo para que el perro no tenga que esperar demasiado a empezar y pierda así el “momentum”.
Y a partir de ahí sólo queda....
¡¡ PRACTICAR, PRACTICAR... Y PRACTICAR!!
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NOTA
Para perros que están empezando al principio EVITAREMOS:
- Espacios muy abiertos.
- Días demasiado ventosos
- Sitios con muchas distracciones
- Trabajar con viento de cara (para evitar que el perro
ventee)
