Como sabéis, una de las características que tiene el Método Kocher de mantrailing es el trabajo en entorno urbano, considerando que es donde el trabajo del perro de mantrailing puede aportar más a un operativo. (En montes y bosques los perros de venteo trabajan de manera excepcional batiendo zonas).
De todas maneras, es importante que nuestros perros sean capaces de trabajar en cualquier entorno y desarrollar siempre su cometido de manera óptima. Un trail, por ejemplo, puede empezar en una zona urbana y acabar en el monte. Un perro bien preparado no debería tener problemas en seguirlo todo.
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El vídeo que comparto hoy simula una situación muy real: Una
persona va en coche hasta el final de un pueblo, allí deja el coche y se pone a
caminar sin rumbo concreto hasta caer en un punto y no poder moverse de allí.
Vamos a ver un trail (corto, de unos 305 metros) que se
inicia tomado el olor del asiento de una furgoneta, sigue por una carreterita asfaltada
y en un cierto punto se adentra entra en una zona de matojos y hierbas secas
cruzada por caminitos hasta llevar a los pies de una nave industrial donde la
persona está tumbada.
La idea era hacer un trail en el que el perro tuviese que
ignorar los caminos y seguir la estela de olor sin tener puntos fijos de referencia.
A menudo vemos que de manera instintiva prefieren seguir caminos más que
adentrarse en el monte o entre los arbustos y perros que en un entorno urbano acostumbran
a buscar en las esquinas, detrás de los coches, etc…
Con este ejercicio pretendemos enseñar al perro a no orientarse
mediante referencias visuales/físicas, sino limitarse a seguir el olor independientemente
de por dónde pase, si cruza carreteras, etc… Así el perro estará siempre
concentrado porque no sabrá nunca en qué momento puede haber un cambio de
dirección que, si no está atento y concentrado, puede perderse, dejando atrás la estela
de olor.
Fijaos en este vídeo cortito cómo la pequeña Gínjol (Sabueso de Sangre
de Baviera de 7 meses) gestiona el momento en que su trail cruza una carretera
asfaltada. El cambio de terreno y el viento hacen que se aleje un poco, pero
enseguida se le acaba el olor delante, hace un negativo, vuelve hacia atrás y
recupere el trail en el punto donde estaba, pero al otro lado de la carretera.
Volviendo al video que nos ocupa: como estábamos entrenando en una zona semi-urbana, veréis que antes y al empezar el Trail nos vienen al paso algunos perros (atados), pero igualmente conseguimos que el perro, animándole con la voz, trabaje.
¡Sed benévolos con la narración! Correr intentando
no tropezar por ese terreno un poco irregular, lleno de plantas secas con espinas
mientras filmas narrando lo que pasa e intentando no mover demasiado el móvil… ¡¡No
es tarea fácil!!
Bixkor es un Border Collie que trabaja de maravilla, muy motivado y a conciencia (¡Como todos los Border Collies cuando trabajan!). Veis que a veces pega nariz al suelo y a veces no. Nunca le hemos condicionado a nada; él trabaja libremente como mejor le va.
Jose, una gran guía canina, le sigue sin frenarle (excepto
en un momento dado que si veis, el perro ya estaba yendo hacia atrás porque el Trail
estaba detrás, aunque yo me confundo de farola y pienso que está delante), permitiéndole
al perro trabajar la estela de olor y hacer sus negativos cuando no tiene olor delante.
¡Sin duda serán un gran binomio operativo!
¡Gracias al Grupo del Perro de Salvamento de Navarra por
confiar en nosotros la formación de sus dos perros de mantrailing! ¡Son un equipo digno de admiración!
